Los domingos por la mañana, no me da pereza levantarme. Se que es día de rastro y comienzo la jornada dominguera contenta y feliz.
Me apasionan los mercadillos, y me encanta buscar y rebuscar en las cajas y cajones que tienen los vendedores. Hay veces que tengo suerte y encuentro cosas, que a mí me encantan.
Os muestro algunas del último domingo.
Las botitas pertenecen a mi hija. Con ellas comenzó a andar y les tengo especial cariño, las demás cosas sí son del rastro.
La estampa, estaba dentro de uno de los libros. La medalla, me parece preciosa y la palmatoria, la enciendo de vez en cuando y la disfruto.
Son cosas que a mí me llegan, deseo que a vosotros también.
1 comentario:
cuanto amor, ilusiones, proyectos,..... se ven truncados y olvidados en cualquier puesto del rastro.
Te felicito por querer conservar todo aquello que formo parte de la vida sencilla de otras personas.
¡Gracias!
Rebeca
Publicar un comentario